Las cifras de nuevos casos en el estado de Victoria ha vuelto a ser una fracción de lo que eran hace unas semanas. Sin embargo, no se espera que se levanten las restricciones sobre el estado que más contribuye a la economía australiana.
A pesar de las buenas noticias, covid probablemente pese sobre el AUD con los eventos que veremos mañana.
Como señal del recrudecimiento de la situación financiera en Australia, el jueves pasado el RBA compró bonos por primera vez desde mayo. Fue una adquisición relativamente modesta de AUD2.0 mil millones, pero podría ser una señal de que el banco de la reserva está preocupado por la liquidez y podría cambiar su política pronto.
Qué estamos buscando
Primero está la reunión de política monetaria del RBA. Como se anticipó la vez pasada, el RBA formalmente anunció el reinicio de su programa de compras. El consenso entre los analistas es que el RBA está cómodo con su postura actual, lo que significa que no se esperan grandes cambios.
Un 100% de los analistas, tanto australianos como extranjeros, están de acuerdo que el RBA no cambiará su tasa, y volverá a comprometerse a mantener el rendimiento de los bonos de 3 años estables. (Cabe recordar que Australia y Japón son los únicos países que actualmente mantienen una política de control de la curva de rendimiento.)
El punto en el que hay algo de desacuerdo es si el RBA indicará que hará más compras, como todos están de acuerdo en que ésa es la forma que aplicará sus intervenciones. De anunciarse más compras, seguramente correlacionará con una baja momentánea en el AUD, como lo fue la vez pasada.
La reacción del mercado
El AUDUSD ha estado al alza desde la última reunión del RBA, especial la semana pasada. Como la vez anterior, hay especulación de que el fortalecimiento del AUD podría llegar a preocupar al banco de la reserva.
Por ejemplo, el Gobernador Lowe podría hacer mención a ello en la conferencia de prensa, en un intento de incentivar al mercado a cambiar sin tener que hacer efectivo un cambio en la política, pues ningún analista cree que hay apetito para influenciar el tipo de cambio a estas alturas.
Se une al club menos prestigioso
Al día siguiente tenemos la anticipada publicación de las cifras del PIB para el segundo trimestre, en los que se prevé que Australia tendrá una baja histórica en su economía. Qué tan mal serán las cifras es donde no hay mucho acuerdo. Hay un rango de proyecciones desde -7,2% hasta -5,3%, pero en la suma están en torno al -6%, en comparación con -0,3% en el primer trimestre.
El PIB anualizado está pronosticado en -5,3% comparado con 1.4% anterior. Lo que motiva la discordia es que hubo un alza en las ventas minoristas en anticipación a medidas de cuarentena que a su vez llevaron a una baja en la demanda. El debate gira en torno a cuándo se manifestaron esos fenómenos.
Entonces, aún si hay mejor resultado que lo esperado, podría no contribuir a mucho optimismo en los mercados, pues símplemente indica que hay que esperar al tercer trimestre para las malas noticias.
