Y llegamos. El evento más anticipado desde que China dijo que había controlado el brote de COVID-19 y estaban reabriendo la economía.
¿De cuánto fue el impacto del virus sobre la segunda mayor economía del mundo?
Bueno, mañana podremos despejar muchas dudas.
Esta vez la cifra no es sólo importante para los socios comerciales de China. Los analistas están tratando de entender cómo evolucionarán las economías afectadas por el nuevo coronavirus, y querrán usar las cifras de China para tener una idea de eso.
Se espera que el efecto del virus en China sea menor, dado el número relativo de casos, y que una parte importante de su economía pudo seguir operando pese al brote.
Qué estamos buscando
Hay un consenso universal que el resultado será la peor cifra en décadas, cayendo en números rojos. Pero qué tan negativo será, es donde hay falta de consenso. Dada la situación sin precedentes, es entendible que habrá una falta de sintonía en las proyecciones. Hay que tener eso presente al considerar cómo reaccionará el mercado.
Lo otro es que este dato probablemente tenga más que un efecto rápido en el mercado. Como muestra otros datos de China, es posible que cambie el sentimiento del mercado. Más allá de la reacción inmediata si cumple o no con las expectativas, podríamos ver un efecto extendido a medida que abren los mercados en Europa y EE.UU.
Entonces, ¿cuáles son las proyecciones?
Varias encuestas muestran diferencias en las opiniones de los economistas. Una encuesta de la agencia francesa de noticias AFP muestra la cara más optimista, proyectando una caída de 4.6% en el primer trimestre. Por el otro lado está la encuesta de Reuters que en que los economistas pronostican una caída de 8.2% en la economía china.
Dentro de ese rango, una consolidación de las proyecciones llega a un -6.5% de crecimiento en China durante el primer trimestre.
En todo caso, las proyecciones todas indican el peor resultado desde que se iniciaron los registros. De allí se proyecta que la economía china crecerá tan solo 1,7% este año, muy por debajo de la tendencia sobre 6,0% que había mantenido por décadas.
Aún no termina
Llegando a finales del trimestre, había esperanza de que China tendría una recuperación rápida al estar reabriendo su producción y reducido el número de contagios.
Pero desvaneció esa esperanza cuando otros países en el mundo empezaron a cerrar sus economías, y terminando sus pedidos desde China. Sí, están abiertas las fábricas en China, pero ahora no escasean los compradores, y eso lleva a prever que en el segundo trimestre, China volverá a tener un resultado negativo para la economía.
Ya las autoridades están preocupados por la acumulación de contenedores en los puertos Europeos y de EE.UU. al llegar los pedidos hechos a finales de febrero y principios de marzo, pero sin poder salir de los puertos. Es una situación similar a lo experimentado por China, e indicador de problemas de abastecimiento futuro.
