La decepcionante encuesta ISM de servicios en EEUU ayer dejó a los mercados temerosos por el crecimiento, marcando la pauta para la semana. Varios países claves darán a conocer sus estadísticas de comercio exterior para el mes pasado, y el consenso entre los analistas es que mostrarán una baja generalizada. El comercio internacional es un indicador de avanzada sobre la salud económica mundial, y es particularmente relevante con el enfoque sobre las dos economías más grandes
Se espera que EEUU caiga en una recesión este año, con el debate centrado en qué tan profundo será. Por otro lado, se esperaba que China mostrara crecimiento sustancial este año luego de salir de las restricciones por el covid. Sin embargo, aún no se manifiesta ese dinamismo, y los pronósticos comerciales indican que se prevé una desaceleración en la economía china. La alta inflación en el mundo hiere a la demanda del consumidor, mientras las tasas altas para combatir el alza de precios reducen la expansión industrial. A no ser que haya una sorpresa por el lado positivo en las cifras de estos días, la narrativa pesimista podría continuar por el resto de la semana.
Miércoles es el día clave
A mediados de semana, China y EEUU informan sus respectivos balances comerciales. El primero tendrá un superávit más grande, mientras el otro verá subir su déficit. En circunstancias normales, no sería una sorpresa ni preocupante. Pero el tema es la direccionalidad de los componentes, que implican menos actividad económica.
Se pronostica que el superávit comercial Chino expanda hasta US$91,0 mil millones desde US$90,2 mil millones en abril. Sin embargo, esta expansión se debe a que las importaciones bajan más rápido que las exportaciones. La demanda por los productos chinos están previstos subir solo 1,0% comparado con 8,5% anterior. La demanda para productos extranjeros está pronosticado a bajar -5,9% comparado con -7,9% anterior.
El otro lado del trato
Cruzando el Pacífico, el déficit comercial estadounidense está previsto a expandir hasta US$78,2 mil millones desde US$64,2 mil millones en abril, debido a un aumento en las importaciones y baja en las exportaciones. Se pronostica que EEUU importó US$325,2 mil millones en productos comparado con US$320,4 mil millones en abril, pero la exportación de productos disminuyó hasta US$247,0 mil millones desde US$256.2 mil millones anterior.
Australia informará su balance comercial el jueves, indicando una baja en el superávit hasta US$12.4 mil millones desde US$15,3 mil millones anterior, debido a una baja en las exportaciones. Si bien los volúmenes de materiales enviados a China siguen relativamente estables, la baja en el precio de los commodities reduce el valor de las exportaciones, y es el valor lo que al final afecta a la divisa.
Proyecciones comerciales y la economía
Hay algunos puntos positivos, como por ejemplo el anuncio reciente desde Australia que estaba cerca de resolver todos los temas comerciales pendientes con China. Pero la tendencia general sugiere que está bajando el monto total del comercio internacional, implicando debilidad en la demanda. Entrado al verano, cuando típicamente aumenta la actividad comercial, esto podría dejar más preocupado al mercado.
