Los mercados siguen ajustando al alza sus expectativas de política monetaria
Las buenas cifras PMI de China dado a conocer el miércoles dió un empujón a los mercados, ya que los inversionistas tomaron más riesgo. Pero hubo dos datos claves después que cambiaron la percepción fuera de China. El primero fue el IPC alemán, que superó a las expectativas, llegando apenas unos días después de que la zona Euro marcara la inflación más alta de la historia.
Luego en la tarde fueron las cifras PMI de EEUU que decepcionaron. Por otro lado, el índice de precios fue bien sobre las expectativas, sugiriendo que la inflación sigue marcando la pauta. La rentabilidad de los bonos subió, revirtiendo la baja en el dólar que se vió al inicio del día.
Más alto por más tiempo
Las cifras vinieron de la mano con comentarios del oficial de la Fed Kashkari, quien este año es un votante en el FOMC. Dijo que estaba ajustando al alza sus proyecciones de la tasa de política monetaria, viendo que debía subir sobre el 5,4% que había previsto en diciembre.
La curva de rendimiento estadounidense invirtió aún más cuando el mercado se ajustó a la expectativa de que la Fed subirá las tasas aún más. La “cola” de la curva también subió, sugiriendo que los inversionistas también prevén que las tasas seguirán altas por un buen tiempo. También implica que los inversionistas se están volcando a la opinión de la Fed, que es que se podrá evitar una recepción. La Fed tendría que recortar tasas si hay una recesión, lo que haría bajar la curva de rendimiento. Pero mientras la curva siga estando alta, implica que el mercado no prevé un recorte en las tasas en algún tiempo cercano.
La situación actual
Como las expectativas sobre las tasas son las que dirigen los flujos de capital entre las divisas, la tasa terminal es de suma importancia para el forex. En estos momentos, los mercados se han ajustado a alzas en tres monedas importantes: el dólar, el euro y la libra. Al estar todos al alza, se cancelan mutuamente. Pero implica que estas divisas podrían seguir fortaleciéndose con respecto a otras donde no se espera un alza en las tasas, como el yen.
Actualmente, el mercado contempla una tasa terminal para la Fed de 5,5%. Para el BOE se espera 5.0%. Y para el BCE la expectativa es que llegue a 4,0% antes de mantener las tasas. Lo que es interesante es que para todos es un alza de 100 puntos base sobre la tasa actual.
¿Y los pronósticos?
Se prevé que tanto el BOE como el BCE suban las tasas en por lo menos 50 puntos base en la próxima reunión, que es la mitad del total de alzas pronosticado. Por el momento aún se espera que la Fed suba en solo 25 puntos base, pero la mayoría a favor de esa opinión está cada vez mermado por los que creen que el alza será de 50 puntos.
En general, la discrepancia entre los analistas no es respecto a dónde llegarán las tasas, sino en cuándo. Lo que implica que los cambios en las expectativas sobre qué pasará en la próxima reunión podría generar fluctuaciones en las divisas. Pero la tendencia mayor volverá a restablecerse. Eso es, a no ser que haya un cambio importante debido a las cifras que se publicarán en los próximos días.
